Quién pudiera borrar los sentimientos de una vez por todas y no caer en la tentación de seguir intentando alcanzar lo inalcanzable. Qué necedad la de nosotros los seres humanos de buscar aquello que por nuestros medios se nos niega. Amar es cuestión de dos, solo uno no lo puede alcanzar todo. No importa cuán grande sea el sentimiento, cuán grande sean las expectativas, el deseo, el esfuerzo. Amar es de dos, y cuando uno de los dos se rinde, es menester que surja en el otro el impulso de abandonar la lucha que, no por falta de interés, se venía dando. ¡Cómo darnos a entender esa ecuación tan simple y tan obvia? Amar es cuestión de dos, y al faltar uno, el esfuerzo del otro es pérdida de tiempo y de sentimientos.
¿Que amar es esperar contra todo, soportarlo todo, perdonarlo todo? Amar es esto, cierto es, pero no de la manera que por tanto tiempo lo hemos practicado. Amar es esperar contra todo sin desgastarnos, Amar es soportarlo todo sin sofocarnos, Amar es perdonarlo todo sin humillarnos al punto de perder el Amor propio, que ante todo debe ser mayor que ningún Amor otro. ¿Cómo amar a quien te desgasta en pensamientos negativos y que lejos de sembrar calma siembra zozobra y desesperanza? ¿Cómo amar a quien prueba tu resistencia con las exigencias más insoportables que ser humano alguno puede soportar? ¿Cómo amar a quien no duda en tomar la imagen del amor que cuidas con devoción y la arroja contra el suelo inmisericordemente? Amar te debe hacer libre; no esclavo de la persona amada. Solo cuando esperas en libertad y lleno de paz; solo cuando lo soportas todo humildemente sin caer en la bajeza del oprobio; solo cuando lo perdonas todo sin sentir que por ello se menoscaba tu dignidad, y, lejos de sentir desesperanza, sientes que el perdón ha sido un acto pleno de libertad; solo entonces es Amor lo que te mueve, de lo contrario es un espejismo que creemos reconocer con la identidad del que soñamos: el Amor verdadero.
Hoy, aun cuando compruebo que corro detrás de sombras, convencido de que perdonar humillaciones ha sido acto de amor verdadero, afirmo que el Amor es alcanzable. Es posible hallar Amor verdadero que, preservando tu libre albedrío, sin rebajas a tu condición de ser humano, obra máxima de la Creación, lo espere todo, lo soporte todo y lo perdone todo. Sé que hay un amanecer para esta noche sin luna, sé que hay un horizonte que se pierde en la distancia y en el que nos espera el encuentro del alma que contraríe a esta realidad agobiante que te hace creer que el amor es cuestión fugaz y que ninguna relación mantiene con la eternidad. Sé que hay mañana para este vacío del alma, para esta sequedad de la mirada, para este resabio en la boca que sabe a amargo recuerdo; hay un mañana que saciará el hueco que nos queda, y la luz de una mirada que hidratará los veranos de nuestros ojos; así como la dulzura de unos labios que borren las huellas del amargo pasado de nuestras vidas.
No todo está perdido. Todavía el corazón palpita, el alma sueña, los dedos que escriben cuentan estrellas, el oído no deja de escuchar la música de la creación y los ojos despiertan de las fantasías que los duermen dentro de las fantasías de fantasías mayores. El mañana se levanta y con el regresarán los glaucos destellos de la esperanza a las sombras vejadas de caricias lisonjeras. Nos despertaremos a la luz sin recordar que la ausencia de luz no ha sido sino momentánea, y al ser heridos por los rayos del sol que nunca duerme, las lágrimas que aún rueden por nuestras mejillas iranle a hacer compañía a las delicadas gotas de rocío que se evaporarán.
Y libres al fin de la opresión de los recuerdos absurdos, libres ya del amor que nos hiciera quedarnos suspirando por otra oportunidad, le haremos compañía al viento que ama libre, sin nada que le detenga o le haga anclar su paso… Amaremos entonces con la libertad que merecía Amar, sin las complicaciones del egoísmo. Habrá muerto el amor que era mentira y nacerá el Amor Verdadero, el Amor evangélico que nada tuvo que ver con lo que pudimos haber sentido. Al fin seremos libres de lo que nos ata, amando libres hasta el final de los tiempos.
¡Seamos libres, entonces, para Amar libres como el viento!
Dic. 27-2011
No hay comentarios:
Publicar un comentario